Nuestro primer día en la isla

En nuestro primer día en la isla era todo nuevo... no conocíamos aun al personaje que teníamos delante, el mundo que nos rodeaba era completamente desconocido y nada sabíamos de los peligros que nos acechaban.

Así que, apareces en una playa desconocida junto con los restos de lo que hasta entonces era el barco en el que navegabas. Más tarde, te enterarás que ibas a ser conducido para trabajar en la isla (aunque ese camino no te iba a gustar mucho).

Tu primera misión es mirar si hay otros supervivientes y aquí es donde ya empieza realmente tu partida. Puedes no hacerle caso y seguir tu camino cual lobo solitario o puedes pararte a buscar si hay algún otro afortunado que se haya salvado. Nosotros optamos por esto último... así conocimos a Sara.

Sara nos guió por los primeros pasos en esta isla, diciendo busca aquí, cocina esto, abre aquello... así que vimos que era una buena idea pararse a hablar con el resto de personajes para poder hacer nuestra vida en la isla más sencilla.

Claro está, si eres un aventajado jugón de los RPG tal vez puedas ir a la aventura y pasar de todo lo que te digan los demás... pero desde luego que te hacen el camino más fácil y te van marcando misiones que te permiten aprender nuevas habilidades.

Así que recorriendo las inmediaciones de la playa, acabamos en el pantano controlado por el Don. Allí descubres que el juego no son sólo misiones simples que te van dando ciertos personajes en el juego... sino que tendrás que introducirte en conversaciones, sonsacar información, hablar con unos y con otros para lograr lo que buscas, y te darás cuenta que los demás no siempre están ahí para ayudarte.

Pero eso ya lo hablaremos más adelante.